VIDEO | Weretilneck se disfraza de defensor provincial mientras el PRO rionegrino coquetea con Milei y busca la interna

El gobernador Alberto Weretilneck pone su ficha en una estrategia de campaña cautelosa: reclama proteger los intereses provinciales sin mencionar directamente a Javier Milei. Pero detrás de ese intento de balance, emerge un PRO local que rompió con La Libertad Avanza… para elogiar al presidente mientras prepara una “batalla” contra los libertarios rionegrinos.
El teatro de la neutralidad
Weretilneck lidera la alianza vecinal “Juntos Defendemos Río Negro”, donde se entretejen el radicalismo, sectores provinciales y el partido local. Finge un discurso propio, proponiendo que los recursos energéticos y productivos de la provincia se reinviertan en salud, educación y obra pública. Aunque el mensaje pretende articular lo local frente al centralismo, el gobernador evita confrontar abiertamente con la Casa Rosada.
El PRO provincial sale de la sombra
Mientras tanto, el presidente del PRO Río Negro, Juan Martín, decidió romper su alianza con La Libertad Avanza. Su campaña se centra en elogiar el modelo económico de Milei, pero con la aclaración de que no es unirme a “delincuentes, vagos ni paracaidistas”. La contradicción: elogiar un modelo nacional mientras se enfrenta a sus expresiones en la provincia.
Martín irá por un lugar en el Senado, enfrentando a Lorena Villaverde (La Libertad Avanza) y a Aníbal Tortoriello, a quien ya derrotó en una interna loca. El discurso del PRO es un acto de supervivencia política más que una propuesta real para Río Negro.
La estrategia electoral: unidad, pero sin fondo
Weretilneck perfila un federalismo discursivo: “la defensa nace acá”, afirma, y reivindica logros como proyectos energéticos, mineros y turísticos. Sin embargo, en medio de deterioro de infraestructura (rutas, obras públicas) y crisis financiera, esas promesas suenan más simbólicas que reales.
Una provincia en disputa por la forma y no el contenido
Mientras Weretilneck administra una candidatura que evita nombrar a Milei, el PRO produce el “PRO rebelde”: seguidores formales de una alianza oficialista que, en los hechos, respaldan el proyecto nacional libertario.
Weretilneck apuesta al blindaje político desde un discurso que parece propio, pero en realidad carece de sustancia. Al mismo tiempo, el PRO rionegrino busca sobrevivir en la arena electoral alineándose con Milei desde la prudencia. Una gobernación sin pulseada real y una oposición que propone show sin proyecto real, la provincia queda atrapada entre la forma y la falta de contenido.