Sumado que el Gobierno cortó las partidas de coparticipación hasta diciembre, Río Negro adelantó en el mes de julio unos 2 mil millones de pesos que le correspondían al mes de octubre, no lo tendrá disponible por lo que desde el Ministerio de Economía tuvieron que sacar una Letra del Banco Patagonia por otros 2 mil millones de pesos para hacerle frente a las obligaciones.

Ahora si bien estos adelantos y sumado a la recaudación que ya el Gobierno está utilizando para el pago de aumentos salariales y que por la alta inflación los gremios pujarán una nueva suba salarial para los Trabajadores Estatales, el drenaje de dinero complica la situación en la entrada al escenario de las próximas elecciones cuando se necesita de caja política.

Desde el Gobierno apuntan a la mala administración de la gobernadora y su ministro de Economía, Luis Vaisberg, quienes administraron pésimamente la situación económica de la Provincia.

Otra de las críticas es que no se hicieron obras ya estipuladas y fueron frenadas y pateadas para el 2023, pero se contradice con el sobreprecio de la compra de un avión sanitario que valió más de 4 millones de dólares.

De tal forma, el aspecto financiero parece estable pero en los próximos meses serán calientes cuando no haya suficiente caja para pagar obligaciones y la meta de llegar en tranquilidad a diciembre es todo un desafío.

En esto se interpone el uso de las cajas para las elecciones, donde la Provincia podría no tener un peso y hacerle frente a Juntos por el Cambio podría ser todo un dolor de cabeza si algunas regiones peronistas no se unen a Juntos Somos Río Negro.