Según fuentes del peronismo, lo mejor que le pudo haber pasado al Frente de Todos es haber quedado tercero y haber hecho una elección deplorable, ni ellos mismos se imaginaban que iban a realizar una pésima performance. Con una facción peronista que se echó a perder, quienes salen heridos son los miles de jóvenes que militaron la causa y se quedan por ahora, con las manos vacías.

Agustín Domingo y Mercedes Ibero fueron los grandes ganadores con el 35 por ciento de los votos, frente a un casi 28 por ciento de las tres listas de Juntos por el Cambio, quedando como tercera fuerza el Frente de Todos de Ana Marks y José Luis Berros, quien apuntó su bronca contra el senador Martín Doñate y La Cámpora de Río Negro.

Otro de los grandes ganadores fue Anibal Tortoriello, que ganó la interna en Cambiemos y apunta a las generales. Ganó con un buen panorama de votos en Cipolletti, donde él fue intendente de aquella y preocupa a otro ex mandatario como Alberto Weretilneck, que nunca se esperó que pueda perder en aquella ciudad.

En definitiva, el ganador de la fecha fue el ex gobernador, donde pudo sortear la pelea con la actual gobernadora, Arabela Carreras y así consolidar su partido posicionando a un candidato como el ex ministro de Economía, quien resultó ganador con una amplia mayoría.

El gran perdedor fue el peronismo/kirchnerismo, donde solo pudo ganar con una mínima diferencia en General Roca y luego perdió en todas las ciudades y localidades de la Provincia.

De esta manera, muchos darán vuelta la página y otros revalidarán los votos de cara a las generales del 14 de noviembre, donde ahora la campaña se recalentará y los perdedores aportarán mucho dinero y cambiaran las estrategias para poder convencer de alguna manera a más rionegrinos y rionegrinas.